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  • Escrito por Cesáreo hace 19 años y 7 meses (01 Ago 2005 18:30)
Hoy comienza la semana 5, ya sólo quedan 2. A estas alturas en general los estudiantes en Berkeley estamos cansados. Algunos porque el ritmo se acelera, ya pasaron algunos exámenes (mid-term exam) y se le ve las orejas al lobo, que viene la semana que viene y otros porque es demasiada rumba para el verano. El próximo jueves se terminan las clases y esperamos la nota final.

Yo no me quejo porque con un curso sólo de 4 unidades se puede llevar perfectamente, es mucha tarea para casa a veces, pero es muy llevadero. Aprovechando la jugada, el viernes me fui a un club de Jazz. La verdad es que pude comprobar parte de esos contrastes de la sociedad norteamericana.

No sabía llegar al sitio muy bien y fui caminando como unas seis manzanas porque pensé que el sitio estaba cerca. Caminar por San Francisco a las 9 de la noche, o al menos por aquella zona, no parece recomendable. Muchos vagabundos (homeless), mucha gente extraña y rara en la calle. En su mayoría hombres de color y/o latinos, así parece uno entender a veces los prejuicios. En realidad no fue un paseo agradable, como otros veces por Union Square, que es la zona "guay".

Al final preguntando, resulta que el sitio estaba más lejos y tuve que coger un bus. Acojonante pero hay que llevar calderilla porque no tienen cambio en el bus. Finalmente me equivoqué de sitio y casi termino en un burdel donde me pareció entender al tipo de la entrada (tenía "sombrero de ala ancha de medio lao" y me hizo recordar la canción de Rubén Blades) que podía encontrar dentro lindas chicas (beautiful girls) por 60 dólares.

Finalmente llegué al sitio y la verdad que con sólo cruzar la puerta del club me encontré en un mundo diferente, sólo unos centímetros y me vi en medio de un bar con seis músicos tocando jazz en directo, parejas compartiendo la cena, algunos tipos sentados en dos sofás (sí, como si estuviéramos en casa), una chimenea y un ambiente de lo más relajado.

Dos centímetros de puerta, y parecen dos países diferentes.

Sección del Artículo
Blog Mi estancia en Berkeley (Summer Sessions 2005)

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